En el lienzo, que supuestamente cubrió el cuerpo de Cristo en el sepulcro, aparece grabada “a fuego” la imagen de Jesús, mostrando rastros de sangre y diversas señales que concuerdan con la Pasión, desde los latigazos a las huellas de clavos de la crucifixión o la lanzada con que el centurión Longinos comprobó su muerte.
La Sábana Santa que se venera a Turín, en el norte de Italia
A raíz de la próxima ostensión (exposición) de la Sábana Santa, que tendrá lugar en Turín desde el 19 de abril hasta el 24 de junio de este año 2015, queremos brindar la segunda parte de nuestra exposición sobre algunos artículos relativos a la Síndone (nombre de la Sábana Santa), y los hallazgos al respecto.
Científicos británicos defienden que hay «pruebas textuales» de la Sábana Santa desde el siglo II (trabajos llevados a cabo en el primero congreso internacional de sindonología – estudios científicos sobre la Síndone-, en Valencia, en abril del 2012).
Más de 400 investigadores, científicos y estudiosos se dan cita en Valencia para aportar nuevas pruebas sobre la veracidad de la Síndone.
29 abril 2012
¿Es la Sábana Santa de Turín la que envolvió el cuerpo de Jesucristo cuando lo crucificaron? Esa es la pregunta que se están haciendo durante todo el fin de semana más de 400 investigadores y estudiosos de todo el mundo en Valencia, dentro del marco del Congreso Internacional sobre la Sábana Santa que organiza el Centro Español de Sindonología (CES), cuyo presidente es Jorge Manuel Rodríguez.
Durante el congreso los profesores Ian Wilson, de la Universidad de Oxford, y Marc Guscin, de la de Manchester, han explicado los nuevos descubrimientos de la historia de la Síndone.
Pruebas textuales sobre la veracidad de la Sábana
En sus intervenciones han citado que hay “numerosas pruebas textuales” de la conservación de la Sábana Santa, entre ellas el llamado “evangelio apócrifo hebreo”, del siglo II. Dichas pruebas también existen en la liturgia mozárabe del siglo VIII en España, en lo relativo al Sábado de Pascua, que fue abolida por Alfonso VI, y en una carta del obispo de Zaragoza Braulio del año 632.
“Hay muchos testimonios de que la Síndone se conservó y, si bien en los primeros siglos no se evidencian datos concretos que puedan identificarla con la que hoy se venera en Turín, lo cierto es que a partir del siglo VII todos los datos ya conducen a ello“, han indicado a Efe.
Así, el códice de Pray, del siglo XII que se conserva en la Biblioteca Nacional de Budapest, en el que se incluye el primer vocablo en húngaro, reproduce una miniatura en la que se representa el cuerpo de Cristo “cuando es amortajado, siendo colocado, exactamente, en la misma posición que el hombre cuya imagen se refleja en la Sábana Santa”. “Los brazos doblados en la misma forma, las mismas manchas de sangre, y los dedos pulgares de las manos doblados hacia el interior, al igual que en la Síndone de Turín”, ha señalado Guscin. Aunque el rastro histórico de la Sábana Santa en Europa está documentado desde el siglo XIV, estas y otras pruebas confirman que hay pruebas textuales que evidencian su presencia desde el siglo II, ha insistido Guscin.
Procedencia de la Síndone
“El presidente del Equipo de Investigación del CES, el doctor en Ciencias Biológicas Alfonso Muñoz-Cobo, dijo por la mañana: “no somos gente rara ni fanáticos religiosos, sólo queremos llegar a la verdad”, ha señalado a Europa Press. Durante el fin de semana una veintena de ingenieros, físicos, licenciados en derecho, en bellas artes, biólogos e historiadores, todos ellos expertos en la Síndone, nombre que recibe la Sábana Santa, tratarán temas como la procedencia de la reliquia y plantearán el panorama que ha dejado tras de sí cerca de 30 años de investigaciones científicas, una de las principales realizadas por el Shroud of Turin Research Project (Sturp).
http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=22262
La siguiente es la transcripción de una entrevista realizada en 2010 a Bárbara Frale, estudiosa que sostiene que la datación realizada con el método llamado del carbono 14, en 1988, es errónea.
“La tela es un objeto del siglo I”
Barbara Frale descifró una escritura en el lino que pertenecería al certificado de defunción de Jesús
Domingo 11 de abril de 2010 | Fuente: http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1252960
TURIN (De nuestra corresponsal).-Barbara Frale, experta en la Sábana Santa y autora del ensayo La sindone di Gesú Nazareno, está entre quienes sostienen que las pruebas de carbono 14 de 1988, que dictaminaron que el lino es de origen medieval, son erróneas. Para ella, la tela es un objeto del siglo I.
Esta historiadora de 40 años, que desde 2001 trabaja en el Archivo Secreto del Vaticano -pero que destaca que su investigación fue “personal y privada”-, en efecto, logró descifrar trazos de escritura que hace 30 años fueron descubiertos en el sudario, y que según sus estudios corresponderían al certificado de defunción del cadáver que habría sido envuelto en él: Jesús Nazareno.
“Descubrí que los trazos de escritura que hay en la Sábana Santa, antes ilegibles, son en verdad parte de un certificado de sepultura escrito en latín, griego y hebreo que comienza: (I)esou(s) Nnazarennos (o)pse kia(tho) in nece(m) pz(o). Es decir: “Jesús Nazareno depuesto a la hora novena. Condenado a muerte en el año 16 de Tiberius”. La hora novena es sobre todo un término legal: era la hora en la que para los hebreos termina el día y comienza el siguiente. Y el año 16 de Tiberio corresponde al año 30 d.C.”, sostuvo Frale en una entrevista con LA NACION.
La reliquia, sobre la que la Iglesia nunca se ha pronunciado, es objeto de arduas disputas científicas. Mientras que muchos historiadores se apoyan en las pruebas de carbono 14 para datar el lienzo entre 1260 y 1390 DC, otros creen que la tela efectivamente envolvió el cadáver de un hombre flagelado, coronado de espinas y crucificado, en coincidencia con las narraciones de cuatro evangelios.
-¿Qué piensa de las pruebas de carbono 14 que concluyeron en 1988 que la Sábana era medieval?
– Que ese resultado es erróneo. La ciencia funciona por aproximación, y el problema del carbono 14 (C14) es que se dio por absoluto un resultado que en realidad era un simple experimento. El C14 funciona en forma relativa, es un método que no es apto para los tejidos, no es confiable.
– ¿Tres laboratorios hicieron el experimento y los tres obtuvieron resultados similares?
– Sí, pero la prueba del C14 no es como el termómetro, donde se obtiene una medición precisa y directa. Y la Sábana Santa está muy contaminada. Tan contaminada que sólo en el fragmento de 6 centímetros sobre el que se hicieron las pruebas del C14 se obtuvieron fechas con 300 años de diferencia. ¡Imagínese en 4 metros las diferencias que puede haber! Además, son numerosas las pruebas que demuestran que la Sábana Santa es un objeto del siglo I.
– ¿Por ejemplo?
– El tejido no sólo es igual a los de la época romana, sino que además tiene un remiendo realizado con una técnica muy complicada, de “falso dobladillo”, de la que en toda la historia del tejido sólo poseemos otro ejemplo: el de un lino encontrado en Masada, la fortaleza judía destruida por los romanos en el año 73. ¡Por no hablar de que en la Sábana Santa se ha encontrado polen de especies vegetales que se extinguieron hace 2000 años!
-¿Cómo se sabe que los trazos de escritura que usted descifró datan del siglo I?
– Por su forma. La escritura, como los vestidos, sigue unas modas. Y los trazos de la Sábana Santa son iguales a los de los papiros de la época de Tiberio y a las inscripciones encontradas en Pompeya y Herculano.
-¿Y no podrían ser una falsificación?
– Sí, pero es difícil. Le explico: antiguamente, y para darle solidez y estabilidad, la tinta contenía metales, que producen iones. Los escritos que aparecen en la Sábana Santa se han creado mediante un proceso físico-químico de transferencia de iones de hierro, un proceso que para que se produzca suelen ser necesarios entre 30 y 50 años. Seguramente, cuando el personaje de la Sábana Santa murió, su cuerpo fue envuelto en el sudario y en el mismo fue pegado, con agua y harina, un documento jurídico en el que se especificaba quién era. Y son los iones de ese documento los que se habrían transferido a la Sábana. Además, tenga en cuenta que muchos de los caracteres no se ven a simple vista, sino que, como mínimo, es necesario hacer una fotografía de la Sábana Santa y observarlos en el negativo. Y sabemos que la Sábana Santa no ha sido manipulada al menos desde 1353. ¿Quién y por qué iba a hacer una falsificación de algo que no iba a detectarse hasta la aparición de la fotografía 600 años después? Me parece absurdo.